A). Análisis de datos históricos
¿Qué pasa con la inflación cuando el tipo de cambio varia?
Podemos analizar y descubrir que las variables de tipo de cambio e inflación denotaron sus tasas más bajas en décadas, al menos en el caso de la inflación, se ve claramente la estrecha relación que existe entre estas variables. En la tabla podemos observar la dinámica tan interesante que ha tenido el tipo de cambio y como esta va ligada de alguna manera a la inflación. Es así como el tipo de cambio debería ajustarse proporcionalmente a la inflación de cada país. La variación del tipo de cambio debe reflejar siempre el diferencial de inflación entre México y el exterior.
Dicho esto podemos deducir que un diferencial positivo de inflación va a influir en una depreciación del tipo de cambio, pero también una apreciación del tipo de cambio va a reducir el diferencial de inflación. Esto significa que si existe una mayor oferta de dólares en relación con la demanda, el tipo de cambio se apreciará y la inflación disminuirá. Esto es justamente lo que ha pasado con el tipo de cambio y la inflación en el transcurso de estos años.
¿Qué pasa con el PIB cuando el tipo de cambio varia?
En 1982, México abandonó una política de tipo de cambio fijo a favor de esquemas de intermedios; sin embargo, éstos no previnieron la ocurrencia de varias devaluaciones drásticas y crisis económicas antes de que un sistema de flotación libre se aplicara a partir de 1995. Esta
política, junto con otras que promueven la estabilidad económica, parece estar funcionando aceptablemente y por ello las discusiones sobre cuál sistema cambiario es el más recomendable para el país por el momento han sido dejadas de lado.
México experimentó una prolongada recesión durante la década de 1980, comúnmente entendida como una secuela de la crisis de la deuda que estalló en 1982. El país tuvo un desempeño económico decoroso desde el comienzo de la década de 1990 hasta el final de 1994 cuando volvió a enfrentar una crisis de proporciones mayores. Después de esto, la economía volvió a crecer nuevamente a tasas altas de 1996 a 2000, ayudada por el notable desempeño de su sector externo.
El papel del tipo de cambio real es especialmente intrigante porque una depreciación está asociada con una contracción del PIB a pesar de tener un efecto positivo sobre el superávit comercial. Esto implica que la relación de los movimientos del PIB con los del tipo de cambio no varía ni con la magnitud ni con el signo de los movimientos de éste: una depreciación (apreciación) está asociada con una contracción (expansión) del producto.
B) Investigación
Tipo de cambio:Precio relativo de las monedas. Precio de la moneda de un país expresado en términos de la moneda de otro país.
Tipo de cambio fijo:Tipo de cambio entre dos divisas fijado por la autoridad monetaria central como fruto de un compromiso legal de la misma.
Tipo de cambio flexible:Tipo de cambio entre dos divisas que puede fluctuar libremente de acuerdo con la oferta y la demanda del mercado
¿Cuáles son los efectos de adoptar alguno de estos dos modelos en una economía?
El tipo de cambio fijo, que vincula el valor de una moneda al de otra moneda extranjera fuerte como el dólar o el euro, presenta muchas ventajas, especialmente para los países en desarrollo que procuran forjar la confianza en sus respectivas políticas económicas. En este tipo de régimen cambiario son menores, en general, las tasas de inflación. No obstante, los países con tipo de cambio fijo parecen ser más vulnerables a las crisis cambiarias que los países con regímenes cambiarios más flexibles. En rigor, a medida que las economías maduran y estrechan sus vínculos con los mercados financieros internacionales, las ventajas de la flexibilidad del tipo de cambio parecen ganar terreno.
¿Cuál es el efecto de las variaciones en el tipo de Cambio, los precios y la competitividad a nivel internacional?
Las variaciones de los tipos de cambio son un elemento perturbador del sistema, y como tal, motivo de preocupación para las empresas por las repercusiones que dichas variaciones pueden acarrear sobre sus resultados.
Las teorías del tipo de cambio tratan de explicar las variaciones de los tipos de cambio que, como hemos visto, son debidas a las variaciones en las actividades comerciales e inversoras en el entorno internacional. A su vez, los dos principales factores que condicionan los comportamientos comercial e inversor de los agentes del mercado a nivel internacional son las tasas de inflación (variación de los precios de los productos y servicios) y los tipos de interés (retribución del capital).
El tipo de cambio se puede expresar como el número de unidades de moneda nacional por unidad de moneda extranjera (términos directos) o como el número de unidades monetarias extranjeras por unidad de moneda nacional (términos indirectos).
Si se conoce el tipo de cambio entre las monedas de dos países, se puede expresar el precio de las exportaciones de un país en términos de la moneda del otro.
Una depreciación de la libra respecto al dólar es una caída del precio de la libra expresado en dólares. Por ejemplo, una variación en el tipo de cambio de 1,50 dólares por libra a 1,25 dólares por libra, supone una depreciación de la libra. Considerando todos los demás factores constantes, la depreciación de la moneda de un país abarata sus productos para los extranjeros. Un incremento en el precio de la libra en términos de dólares, por ejemplo, de 1,50 dólares por libra a 1,75 dólares por libra, representa una apreciación de la libra respecto al dólar, y si se supone todo lo demás constante, la apreciación de la moneda de un país encarece sus productos para los extranjeros. Una apreciación de la libra respecto al dólar es al mismo tiempo una depreciación del dólar respecto a la libra. A partir de lo expuesto podemos arribar a la siguiente conclusión: cuando la moneda de un país se deprecia, sus exportaciones se abaratan y sus importaciones se encarecen. Una apreciación de la moneda tiene el efecto contrario: encarece sus exportaciones y abarata sus importaciones (Krugman, 1996).